Viajar en una nave llamada entusiasmo, que planea a una altura suficiente dentro de una escala imaginaria hacia el año 2356 es la propuesta artística coloreada con pincel y acuarela sobre papel.

La idea es viajar y que la imagen este en constante movimiento hace el reflejo de la entrega, cada visión es una reciprocidad entre el observador y el color ambos se ven favorecidos en el vagar PSICOloristico.

La invitación es a navegar y a emborracharse mesclando lo entregado con lo imaginable nunca olvidando que “el buen gusto es el refugio de los imbéciles”.